Mi abogado, un tipo serio y con las cosas claras.
Antes de irse a la cárcel, mi abogado me aconsejó que pusiera por escrito dos cosas:
1. Debido que a menudo trabajo haciendo fotografía callejera, todo aquel que aparezca en este sitio sin saberlo tiene dos opciones: puede escribirme y con gusto le haré llegar una copia de la imagen o bien la fotografía será eliminada si así lo desea. De la misma manera, ninguna fotografía callejera de personas será comercializada.
2. Todas las imágenes y textos aquí publicados son propiedad de Rodrigo Acuña Bravo salvo donde se indique lo contrario, además todo está protegido bajo licencia Creative Commons a pesar de qué no entiendo un carajo que significa realmente eso.
Pero lo que sí sé, es que cualquier utilización de material sin consentimiento del autor constituye un delito. Si desea adquirir algún derecho de reproducción, sea o no para fines comerciales, no les cuesta nada contactarme.
El FBI no me protege, ni la ONU ni la OEA ni la RAE ni ninguna otra sacra institución con tres letras como sigla, y yo soy re buena onda, pero si alguien despierta un día con intención de hacerme perro muerto sírvase remitirse a la siguiente escena fílmica.

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